domingo, 16 de mayo de 2010

LA INSPIRACIÓN


El Joanet no se sentia con ganas de escribir, se sentia melancolico. Se encontraba totalmente en blanco delante del ordenador. De sus manos no salia ninguna letra, ningún pensamiento resurgia de su cabeza. Se encontraba bloqueado. No se habia encontrado nùnca en esa situación y en todo momento se preguntaba -¿Que me pasa?- Se preguntaba a sì mismo, impontente y turbio de ideas.

Cuando se encuentra uno en esta situación, ¿Que se ha de a hacer? Pensaba sin encontrar ninguna respuesta. Miro su agenda y la cogio junto a su boligrafo,la respuesta se encontraba en el exterior. La inspiración no se encontraba en aquella habitación. Tenia que ir a la caza de esos personajes caprichosos que deambulan por la ciudad, en el metro, en el autobus, en los parques, en las avenidas, en toda la ciudad y que seguro que buscaban su momento de gloria reflejandose su vida en un papel.

Abrio la puerta y comenzo a bajar las escaleras. Se dirigio al centro de la ciudad en metro donde se encontraba un gran parque. Durante el viaje fue apuntando todas las escenas curiosas con las que se iba encontrando. Miraba a su alrededor, una pareja de enamorados que se miraban dulcemente, una mujer que leia un libro concentrandose en la lectura como si ella fuese el personaje central. Un padre que acariciaba dulcemente a su hijo mientras mecia el cochecito lentamente. Decenas de personajes se cruzaban delante de su mirada y él las iba anotando cautelosamente con toda generosidad de detalles.

Habia llegado a su destino. espero a que se abrieran las puertas del vagón mientras acababa las últimas anotaciones. Y comenzo a caminar por el largo anden. Una vez en el exterior una tienda de flores llamo su atención. Su curiosidad le llevo la mirada hacia una pequeña flor que se encontraba tapada por sus hermanas mayores.

-Ella, también necesita una oportunidad- penso entre sí.

Le señalo al dependiente la pequeña flor y la compro. Con ella en la mano miro a su alrededor y todo era verde y lleno de vida. Busco un lugar donde plantarla, una oportunidad de vida, de un nuevo comienzo, una vida en libertad. Una oportunidad como la que iba buscando para escribir esa historia, la historia del dia.

Despúes de unos minutos encontro su emplazamiento. Creia que tanto ella como él podrian comenzar una nueva historia, una historia de verdad y la planto con todo cariño. Así de esta forma los dos de algún modo se dieron una opotunidad. Descansando un momento, recogio los últimos apuntes delante de ella. Y con una mirada de complejidad se dispidio deseandole mucha suerte.

El dia habia sido fructifero al final. Volvio hacia casa como habia llegado y esta vez con una multitud de ideas. De esta forma bajo las escaleras del metro. Volvio a mirar otra vez a su alrededor. Cerro la agenda y ante sus apuntes ¿Quien sabe?......Podrías estar tú......entre sus personajes